Por Enid López

Cuando el COVID-19 llegó a Bolivia en 2020, uno de los medicamentos que se utilizó de forma empírica para hacer frente a la pandemia fue la Ivermectina. Entre marzo de 2020 y enero de 2022, el Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes) registró al menos 50 adjudicaciones para la adquisición de este medicamento. Pero ¿Qué dice la evidencia científica?

 

Según datos de la plataforma "Contratos Abiertos Bolivia" desarrollado por el Lab TecnoSocial, en base a información disponible en el Sicoes, entre marzo de 2020 y enero de 2022, se adquirieron 618.910 capsulas de Ivermectina, principalmente a través de licitaciones realizadas por municipios de diferentes departamentos. Del monto total, Cochabamba adquirió 12.700 cápsulas con el siguiente detalle por municipios.   

 

La inversión ejecutada en las licitaciones adjudicadas asciende a más de 3,6 millones de bolivianos. Pero, transcurrieron más de dos años para tener evidencia científica sobre la efectividad de este medicamente frente al COVID-19.

El portal web “científicamente comprobado” de Salud con Lupa, que recoge evidencia científica de 47 tratamientos y medicamentos más usados durante la pandemia, categoriza a la ivermectina como tratamiento de uso no apropiado en base a la publicación del ensayo Together 2 que concluyó que la Ivermectina no resultó eficaz para una menor incidencia de ingreso a los hospitales por complicaciones del Covid-19.

En COVID-19 Living OVerview of Evidence (L·OVE), una plataforma de acceso abierto, creada y mantenida por la fundación Epistemonikos, existen diferentes investigaciones sobre este tema, donde se concluye:

“La ivermectina no tuvo ningún efecto significativo en los resultados de los pacientes con COVID-19 y, como recomienda la OMS, el uso de ivermectina debe limitarse a los ensayos clínicos”  (Ivermectina bajo escrutinio: una revisión sistemática y metanálisis de eficacia y posibles fuentes de controversias en pacientes con COVID-19)

“Hubo cargas virales más bajas y cultivos menos viables en el grupo de ivermectina, lo que muestra su actividad anti-SARS-CoV-2. Podría conducir a reducir la transmisión en estos pacientes y fomentar más estudios con este fármaco” (El efecto de la ivermectina sobre la carga viral y la viabilidad del cultivo en el tratamiento temprano de pacientes no hospitalizados con COVID-19 leve: un ensayo doble ciego, aleatorizado y controlado con placebo)

Según Ever Luizaga, especialista terapia intensiva, neumología, enfermedades del sueño y medicina interna, inicialmente se identificó que la ivermectina tenía propiedades antivirales. “Usábamos el antiparasitario porque no había otras alternativas, no teníamos un estudio farmacológico. Entonces se ha utilizado sin ningún aval lamentablemente no teníamos de otra”.

 

¿Quiénes suministraron Ivermectina en Bolivia?

Según datos de la plataforma "Contratos Abiertos Bolivia" desarrollado por el Lab TecnoSocial, en base a información disponible en el Sicoes, alrededor de 14 proponentes entre laboratorios, importadoras y empresas unipersonales se adjudicaron las licitaciones y suministraron de Ivermectina en la crisis por el COVID-19.

 

En Bolivia se hicieron ensayos clínicos de alto nivel 

A iniciativa del Colegio Médico de Cochabamba, en coordinación con el Instituto de Salud Global de España (IS Global), la Universidad Católica de Lovaina y la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), se desarrolló una investigación en fase II sobre la Ivermectina.

El objetivo de la investigación denominada SAINT-BO fue probar el fármaco en 90 pacientes para conocer su efectividad frente al COVID-19. “Lo único que te puedo asegurar de este estudio hasta ahora es que es un fármaco seguro”, sostuvo el epidemiólogo y exdirector de la Caja Petrolera de Salud, George Avilés que lideró esta investigación. También informó que, a una dosis elevada, existe una posibilidad de reducción de la carga viral.

 

“En el contexto formal científico, la opinión de un experto si bien es válida genera un nivel de evidencia muy bajo. Objetivamente lo que tiene que hacerse, el camino que tiene que seguir un investigador es probar el fármaco en el marco de in ensayo clínico”, explicó Aviles

Línea del tiempo: La ivermectina en las redes sociales

Los contenidos que circularon en las redes sociales donde se mencionaba la palabra Ivermectina son variados y van desde comunicados verdaderos anunciando su producción masiva hasta su inclusión en kits de medicamentos para tratar el coronavirus. Observe a continuación:

 

 

La compra de Ivermectina fue la respuesta inmediata de municipios e incluso centros de salud en Bolivia, ante la crisis sanitaria que afectaba al mundo entero. La evidencia científica llegó un tiempo después, tras varios estudios en los que se puso a prueba la eficacia del medicamento para evitar que pacientes con COVID-19 lleguen a hospitalizarse. 

 

Nota: Este artículo fue redactado con datos de la plataforma "Contratos Abiertos Bolivia" desarrollado por el Lab TecnoSocial. Puede acceder a la metodología que se utilizó para el acceso a datos del Sicoes.